PERU-. ( AGENCIALAVOZ.COM ) Mientras unos celebran las fiestas de fin de año, se reúnen con sus familiares e intercambian regalos, otros se hunden en una depresión tan profunda que inclusive los lleva al suicidio.
La Navidad no es una gran fecha para todos. Según el Instituto Guestalt de Lima, en diciembre los casos de depresión y suicidios se elevan en un 40% en comparación con otros meses.
¿La razón? Los especialistas de dicho instituto indicaron que “la Navidad recuerda a las personas sus problemas económicos, la lejanía o la muerte de seres queridos, las rupturas amorosas y problemas familiares. Es la época del año en que las personas evalúan si cumplieron sus metas trazadas o no”.
Así, las mujeres que se encuentran solas y las personas de la tercera edad son los grupos más propensos a sufrir de estos problemas: se sienten más solos de lo normal porque no participan de los preparativos y las fiestas como el común de las personas.
Según el psicólogo y psicoterapeuta Manuel Saravia, director del Instituto Gestalt, “por lo general una persona que se deprime en estas fechas quisiera dormir durante semanas para evitar las reuniones familiares, los balances personales y la frustración por no haber cumplido los objetivos propuestos”.
El especialista resaltó la importancia de diferenciar una tristeza simple con una depresión. “Los síntomas clásicos de la depresión son: fatiga extrema, aumento o pérdida del apetito, incremento o disminución de peso, disminución del deseo sexual, exceso o perdida del sueño, disminución en la capacidad de concentración, tristeza intensa, ansiedad o irritabilidad, aislamiento, pensamientos incontrolables sobre muerte y suicidio, sentimientos de culpa, etc.”, explicó.
¿La razón? Los especialistas de dicho instituto indicaron que “la Navidad recuerda a las personas sus problemas económicos, la lejanía o la muerte de seres queridos, las rupturas amorosas y problemas familiares. Es la época del año en que las personas evalúan si cumplieron sus metas trazadas o no”.
Así, las mujeres que se encuentran solas y las personas de la tercera edad son los grupos más propensos a sufrir de estos problemas: se sienten más solos de lo normal porque no participan de los preparativos y las fiestas como el común de las personas.
Según el psicólogo y psicoterapeuta Manuel Saravia, director del Instituto Gestalt, “por lo general una persona que se deprime en estas fechas quisiera dormir durante semanas para evitar las reuniones familiares, los balances personales y la frustración por no haber cumplido los objetivos propuestos”.
El especialista resaltó la importancia de diferenciar una tristeza simple con una depresión. “Los síntomas clásicos de la depresión son: fatiga extrema, aumento o pérdida del apetito, incremento o disminución de peso, disminución del deseo sexual, exceso o perdida del sueño, disminución en la capacidad de concentración, tristeza intensa, ansiedad o irritabilidad, aislamiento, pensamientos incontrolables sobre muerte y suicidio, sentimientos de culpa, etc.”, explicó.
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